Por: José Miguel Vázquez.
Por estos días se ha estado recordando en Matanzas el estreno en la Sociedad Casino Español (hoy Biblioteca Gener y del Monte), de lo que se conoció como Danzonete, creado por Aniceto Díaz, y que fue una variante del conocido Danzón, pero un poco mas movido.
Eso sucedió el 8 de junio de 1929, allí tuvo lugar un baile para estrenar la pieza titulada “Rompiendo la rutina”.
Le correspondió a un matancero Arturo Aguiló el honor de interpretar, la que con el decursar del tiempo se convertiría en una popularísima canción.
Nacía así el Danzonete, que como su nombre lo indica surgió del propio Danzón, o al menos su creador se inspiró en él, por lo que Matanzas se convertía en la ciudad de Cuba cuna de estos dos ritmos cubanos.
Con el paso del tiempo surgieron otros afamados intérpretes de esta variedad musical, como es el caso de Paulina Álvarez, quien recibió el sobrenombre de "La Emperatriz del Danzonete", que con esa personalidad penetrante que la caracterizó, logró hacer mover los piés a toda una generación de aquella época.
Por eso a ningún cubano se le olvida aquél estribillo que dice así;
Danzonete, Danzonete
Por estos días se ha estado recordando en Matanzas el estreno en la Sociedad Casino Español (hoy Biblioteca Gener y del Monte), de lo que se conoció como Danzonete, creado por Aniceto Díaz, y que fue una variante del conocido Danzón, pero un poco mas movido.
Eso sucedió el 8 de junio de 1929, allí tuvo lugar un baile para estrenar la pieza titulada “Rompiendo la rutina”.
Le correspondió a un matancero Arturo Aguiló el honor de interpretar, la que con el decursar del tiempo se convertiría en una popularísima canción.
Nacía así el Danzonete, que como su nombre lo indica surgió del propio Danzón, o al menos su creador se inspiró en él, por lo que Matanzas se convertía en la ciudad de Cuba cuna de estos dos ritmos cubanos.
Con el paso del tiempo surgieron otros afamados intérpretes de esta variedad musical, como es el caso de Paulina Álvarez, quien recibió el sobrenombre de "La Emperatriz del Danzonete", que con esa personalidad penetrante que la caracterizó, logró hacer mover los piés a toda una generación de aquella época.
Por eso a ningún cubano se le olvida aquél estribillo que dice así;
Danzonete, Danzonete
prueba y vete
Yo quiero bailar contigo
Al compás del Danzonete.
Yo quiero bailar contigo
Al compás del Danzonete.
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