sábado, 30 de marzo de 2019

Congresista estadounidense se pronuncia en contra de la Ley Helms-Burton

El congresista demócrata James McGovern cumple una amplia agenda, que incluye encuentros con autoridades y estudiantes, así como la asistencia a la inauguración del taller de restauración en la Finca Vigía, donde vivió el escritor norteamericano, Ernest Hemingway, Premio Nobel de Literatura
El congresista demócrata por Massachusetts, James McGovern, de visita en Cuba, ha señalado que Estados Unidos debería eliminar el bloqueo y las restricciones de viaje de norteamericanos a la isla. Foto: Tomada de La Demajagua
James McGovern, congresista demócrata por Massachusetts, de visita en Cuba, fue recibido este viernes en la sede del Ministerio de Relaciones Exteriores de la Isla (Minrex), por la subdirectora de la Dirección General de Estados Unidos, Johana Tablada
El congresista cumple una amplia agenda, que incluye encuentros con autoridades y estudiantes, así como la asistencia a la inauguración del taller de restauración en la Finca Vigía, donde vivió el escritor norteamericano, Ernest Hemingway, Premio Nobel de Literatura.
McGovern cuenta con un historial destacado en la promoción de las buenas relaciones entre La Habana y Washington, en varias ocasiones ha abogado por el cese del bloqueo y la normalización de los vínculos entre Cuba y Estados Unidos.
En horas de la tarde de este viernes sostuvo un encuentro con estudiantes del Instituto Superior de Relaciones Internacionales Raúl Roa García. Finalizado el evento se produjo un breve intercambio con la prensa nacional y extranjera.
McGovern señaló en el intercambio que Estados Unidos debería levantar el bloqueo económico, comercial y financiero impuesto a Cuba y las restricciones de viaje de los norteamericanos a la Isla.
De acuerdo con el congresista estadounidense, la mayoría de sus conciudadanos está a favor de establecer mejores vínculos con Cuba. «En el Congreso predomina también esa visión, pero la administración Trump tiene otra postura», precisó.
Defendió la anulación de la Ley Helms-Burton y dijo que «no es constructiva ni productiva y debería anularse», subrayó a periodistas cubanos y extranjeros.
Las declaraciones del representante demócrata por Massachusetts se producen en medio de un contexto de marcada hostilidad contra Cuba por parte de la actual administración en la Casa Blanca, encabezada por el presidente Donald Trump, que pretende incrementar el bloqueo a través de la aplicación total del Título III de la Ley Helms-Burton.
«Decepciona el interés en impulsar esto», señaló McGovern. En la Cámara de Representantes, según su criterio, dominada por los demócratas, pudieran avanzar iniciativas dirigidas a fomentar una mejoría en los vínculos bilaterales, a partir de ponerle fin al bloqueo y posibilitar a los estadounidenses hacer turismo en la Mayor de las Antillas.

jueves, 28 de marzo de 2019

Se proclamará el próximo 10 de abril la nueva Constitución de la República





El Consejo de Estado, en reunión efectuada el pasado lunes 25 de marzo, dispuso la celebración de una Sesión Extraordinaria de la Asamblea Nacional del Poder Popular para el venidero miércoles 10 de abril, a las 9:00 a.m., en el Palacio de Convenciones, con el objetivo de proclamar la nueva Constitución de la República de Cuba, refrendada en Referendo Constitucional el 24 de febrero del presente año. 

Asimismo, aprobó dos decretos-leyes, el «Del Sistema Nacional de Grados Científicos», relativo a la formación doctoral en el país y al funcionamiento de la Comisión Nacional de Grados Científicos, y el «Del Creador Audiovisual y Cinematográfico Independiente», que instituye las figuras del Creador y los Colectivos de Creación Audiovisual y Cinematográfico, con el objetivo, entre otras cuestiones, de garantizar la calidad de sus producciones y el desarrollo de esa actividad. Ambas disposiciones junto a sus normas complementarias serán publicadas próximamente en la Gaceta Oficial de la República de Cuba.

El Consejo de Estado realizó, además, un análisis preliminar de los resultados del Referendo Constitucional, a partir de la información brindada por la Comisión Electoral Nacional.

Por último, acordó convocar a otra Sesión Extraordinaria de la Asamblea Nacional del Poder Popular para el 13 de abril, a las 9:00 a.m., en el propio lugar, a los efectos de evaluar la marcha del Plan Nacional de Desarrollo Económico y Social hasta el año 2030 y conocer el estado de la implementación de los Lineamientos aprobados en el Séptimo Congreso del Partido
.
Los días 11 y 12 de abril sesionarán las comisiones permanentes de nuestro Parlamento.

martes, 26 de marzo de 2019

La agenda oculta tras Prosur, la Payá y un circo con títeres manejados por USA

La agenda oculta tras Prosur, la Payá y un circo con títeres manejados por USA


A todas luces la realización del Foro por la Democracia 2019 en Santiago de Chile y la ulterior convocatoria a la formación del Foro para el Progreso de América del Sur (PROSUR), como intento de dar el golpe de gracia al sueño integracionista de la  Unión de Naciones Suramericanas (UNASUR), no fueron solo lo que públicamente transcurrió ante la prensa. Una agenda secreta se cocinó en ellas y fue resultado de la consumación de una conspiración fraguada desde hace meses desde Estados Unidos para consolidar nuevamente su hegemonía en América Latina.
 
La clara intención es apalancar el cerco diplomático contra Venezuela, Cuba y Nicaragua con dos nuevos organismos que complementarán la labor de la OEA y del Grupo de Lima para propiciar acciones más drásticas contra estas naciones, las que pueden –incluso– poner sobre el tapete la intervención armada contra Venezuela y Nicaragua en un primer paso y repetir posteriormente esto contra Cuba en dependencia de los éxitos que vayan alcanzando en el escenario convulso que vivimos hoy. 
 
Los actores de estos planes pueden dividirse entre titiriteros y marionetas cuyo rol ha sido diferente en cuanto a su rol y sumisión a la convocatoria. No fue difícil para la administración Trump y su Departamento de Estado lograr sus propósitos. Los manejadores de la conspiración están integrados en un grupo de tarea conformado por Mike Pompeo, Marco Rubio, Elliot Abrams, Kimberly Breier, John Bolton y otros funcionarios de menor peso, quienes han sido sumamente activos en este despropósito.
Los títeres están aglutinados en dos camadas de figuras públicas quienes han tenido reuniones públicas y secretas con sus manejadores –aunque otras veces han recurrido a emisarios de confianza como Eduardo Bolsonaro y sus cancilleres– en visitas bidireccionales realizadas entre USA y sus naciones. Entre ellos sobresalen y buscan capitanear las acciones en sumiso afán de protagonismo varios presidentes: el argentino Mauricio Macri, el brasileño Jair Bolsonaro, el colombiano Iván Duque y el chileno Sebastián Piñera. Otros mandatarios han sido más cautos y recelosos de desenmascararse públicamente, aunque no dejan de dejarse llevar en la conspiración, como son los casos del peruano Martín Vizcarra, el ecuatoriano Lenin Moreno y el paraguayo Mario Abdo. Punto y aparte fueron, en esta ocasión otros genuflexos presidentes de Centroamérica y alguno del Caribe.
 
Aunque en apariencia la formación de Prosur, con escaso peso y presencia políticos dejó mucho que desear, tras su nacimiento en La Moneda y no muestra una cohesión de criterios, salvo en temas como la democracia y los derechos humanos, levanta recelos y preocupaciones. La malograda ambición del chileno Sebastián Piñera, aupado por Vamos Chile, de ejercer un cacicazgo de la derecha latinoamericana, se ve saboteada por otras ambiciones personales de Duque, Macri y Bolsonaro, así como los compromisos que Washington ya ha establecido con ellos, sobre todo en los que ve como copartícipes en sus planes de agresión contra Venezuela.
 
A otros títeres de segundo nivel ha recurrido Estados Unidos para fortalecer el Foro por la Democracia 2019 y llenar los salones del ex Congreso chileno, cursando invitaciones a diestra y siniestra a ex mandatarios como Andrés Pastrana. Álvaro Arzú y Nicolás Sarkozy; a Mario Vargas Llosa, a la Fabiana Rosales (esposa de Guaidó), a los que se suman en una larga lista de personeros de la derecha actual como la senadora argentina y vicepresidenta del partido Propuesta Republicana, Laura Rodríguez Machado; el presidente de la UPLA y candidato presidencial en Bolivia, Óscar Ortiz. En total, decenas de partidos de derecha y ONGs tapaderas de turbios intereses USA y europeos han estado presentes en el evento, cuya finalidad también fue consolidar a la derecha organizada dentro de las llamada Unión de Partidos Latinoamericanos (UPLA). No fue raro, entonces, ver entre los asistentes a representantes del venezolano Centro de Divulgación del Conocimiento Económico para la Libertad (CEDICE), la rosarina Fundación Libertad, la Fundación Pensar, la Red Liberal de América Latina (Relial), la Sociedad Mont Pelerin, el Centro de Investigación y Estudios Legales (CITEL) y Ecuador Libre, entre otros.
Especial presencia que pone de manifiesto la estrategia anticubana de los conspiradores USA y de la derecha latinoamericana, fue la presencia de un seleccionado grupito de los llamados “opositores” cubanos. Por un lado la coordinadora del proyecto Cuba Decide, Rosa María Payá, quien asistió como invitada especial y con una cobertura previamente garantizada por Almagro y Marco Rubio para que brillara en los turbios escenarios del Foro, llegando incluso a garantizarle una entrevista con Jair Bolsonaro y otros asistentes, a todos los que solicitó acciones inmediatas contra Cuba. Otros asistentes fueron los miembros de la llamada  Asamblea de la Resistencia Cubana, entre los que estaban los reconocidos terroristas Luis Zúñiga y Horacio García, así como el provocador Orlando Gutiérrez-Boronat. Los mismos fueron acompañados por el seudo jurista mexicano  René Bolio, presidente del engendro de guerra jurídica anticubana, la llamada Comisión Justicia Cuba.
 
El plan de los contrarrevolucionarios anticubanos asistentes fue colocar a Cuba dentro del escenario de futuros centros de ataque, sobre todo buscando la irrisoria idea de instalar un tribunal internacional para juzgar supuestos delitos de lesa humanidad del Gobierno de Cuba.
 
No cabe duda que el fiasco ocurrido en Chile, aunque intenta fortalecer a la derecha en la región, cumple con las mínimas esperanzas de Washington pues consolidan un paso más de la guerra ideológica contra Venezuela, Cuba y Nicaragua, abriendo posibilidades de fortalecer las acciones punitivas contra estas naciones, bendiciendo opciones militares impensables.

lunes, 25 de marzo de 2019

10 imágenes de sus Altezas Reales el Príncipe de Gales y la Duquesa de Cornualles a su llegada a La Habana


Después de su llegada al Aeropuerto Internacional José Martí, los distinguidos visitantes colocaron ofrendas florales al Héroe Nacional cubano en la base del monumento que lo honra en la Plaza de la Revolución
Foto: José Manuel Correa
En horas de la tarde de este domingo llegaron a La Habana sus Altezas Reales el Príncipe de Gales y la Duquesa de Cornualles, en una visita oficial que incluirá conversaciones con el Presidente de los Consejos de Estado y de Ministros, Miguel Díaz-Canel Bermúdez.
Foto: Endrys Correa Vaillant
Foto: Endrys Correa Vaillant
Tras su llegada al Aeropuerto Internacional José Martí, los distinguidos visitantes colocaron ofrendas florales al Héroe Nacional cubano en la base del monumento que lo honra en la Plaza de la Revolución.
Foto: Endrys Correa Vaillant

Esta constituye la primera visita oficial realizada por un miembro de la familia real a Cuba, aunque la Isla y Reino Unido mantienen relaciones históricas ininterrumpidas desde 1902.
Foto: Endrys Correa Vaillant

La visita ratifica la profundización del diálogo político entre ambos países y la voluntad de continuar fortaleciendo las relaciones bilaterales en todos los ámbitos.
Foto: José Manuel Correa

Existe un interés compartido por ambos gobiernos de continuar fortaleciendo las relaciones económicas y la cooperación en áreas de interés común como la energía, la agricultura, la salud y la educación.
En el año 2016, el entonces Secretario de Estado para Asuntos Exteriores y de la Mancomunidad, Philip Hammond, realizó una visita a Cuba, la primera de ese nivel que desarrollara una autoridad de ese país desde el triunfo de la Revolución cubana.
Foto: José Manuel Correa

También el tránsito por Reino Unido, realizado por el presidente de los Consejos de Estado y de Ministros Miguel Díaz-Canel Bermúdez, en noviembre de 2018, fue ocasión propicia para sostener diversos encuentros, que incluyeron a la segunda figura del gobierno y actual ministro de Hacienda, Philip Hammond.
Foto: José Manuel Correa
Foto: José Manuel Correa

Cuba igualmente reconoce el tradicional apoyo de Reino Unido a la resolución cubana contra el bloqueo, presentada cada año en la Asamblea General de las Naciones Unidas, y agradece el rol positivo de este país en el desarrollo de una relación constructiva y respetuosa de nuestro país con la Unión Europea.
Foto: José Manuel Correa

sábado, 23 de marzo de 2019

Díaz-Canel: No habrá ley que devuelva a Cuba a la esclavitud




El presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, afirmó hoy que ni la Ley Helms-Burton de Estados Unidos ni ninguna otra devolverá a Cuba a la dominación extranjera.

‘Cuba es soberana hace 60 años y no habrá ley ni fuerza injerencista que la devuelvan a la esclavitud’, subrayó en su cuenta en Twitter.

Díaz-Canel calificó a la Ley Helms-Burton de una completa aberración jurídica y advirtió que con la misma, Washington pretende ‘robar por ley lo que no ha podido conquistar a la fuerza’.

Vigente desde 1996, la iniciativa puesta en vigor por el entonces presidente norteamericano, William Clinton, tras su aprobación en el Congreso, busca abiertamente el cambio de régimen en la isla e incluye la asfixia económica como punta de lanza para lograrlo.

La ley tiene cuatro títulos, pero el tercero de ellos, que permite demandas en cortes estadounidenses contra propiedades ‘confiscadas’ (así le llaman a las nacionalizaciones tras la Revolución), había sido suspendido por los presidentes en la Casa Blanca por seis meses, hasta que Donald Trump -después de hacer lo mismo en 2017 y 2018, decidió en enero hacerlo por solo 45 días.

A principios de este mes, el Departamento de Estado anunció la suspensión por otros 30 días, sin embargo, permitió que a partir del 19 de marzo se presenten demandas judiciales contra más de 200 empresas cubanas incluidas en una lista unilateral de sanciones económicas
.
El gobierno cubano ha rechazo la escalada en la hostilidad de Washington, el recrudecimiento del bloqueo por la actual administración y el intento de apelar a una conducta extraterritorial para impedir el acceso de la isla a inversiones importantes para su desarrollo socioeconómico.

Esta semana, el director general para Estados Unidos de la cancillería, Carlos Fernández de Cossío, reiteró que la Ley Helms-Burton es inaplicable en Cuba y que La Habana está dispuesta a entrar en un proceso de negociación para que puedan ser compensados los reclamantes de las nacionalizaciones apegadas al Derecho Internacional.
En el propio 1996, la Asamblea Nacional del Poder Popular del país caribeño aprobó la Ley 80 de Reafirmación de la Dignidad y Soberanía Cubanas, que en su artículo 1 declara ilícita la Helms-Burton, inaplicable y sin valor ni efecto jurídico alguno.

‘Consecuentemente se considera nula toda reclamación amparada en ella de persona natural o jurídica, cualquiera que fuere su ciudadanía o nacionalidad’, precisa.

‘En su segundo artículo, reafirma la disposición del gobierno de Cuba, expresada en las leyes de nacionalización promulgadas hace más de medio siglo, en lo relativo a una adecuada y justa compensación por los bienes expropiados a las personas naturales y jurídicas que en ese momento ostentaban la ciudadanía o nacionalidad estadounidense.
(Con información de Prensa Latina)

lunes, 18 de marzo de 2019

Cazando mentiras: The New York Times frente a la ética de la salud cubana



Por: Redacción Cubadebate
Publicado en: Cazador de Mentiras
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Médicos cubanos en Venezuela. Foto: Archivo.

El diario The New York Times publicó el domingo un reportaje de su periodista Nicholas Casey bajo el efectista título  Nicolás Maduro usó a médicos cubanos y a los servicios de salud para presionar a los votantes.
Usando, él sí, el supuesto testimonio de 16 exintegrantes de la Misión Médica Cubana en Venezuela,  Casey apunta a la insólita historia de que los trabajadores cubanos de la salud fueron utilizados para amenazar a pacientes e incluso coercionarlos, negándoles el servicio, si no votaban por Maduro en las elecciones del pasado 2018.

Según el Times:

Se usaban muchas tácticas, dijeron los doctores, desde simples recordatorios para votar por el gobierno hasta denegar tratamiento a los simpatizantes de la oposición que tienen enfermedades mortales.

Los médicos cubanos comentaron que se les ordenó ir puerta por puerta en barrios pobres para ofrecer medicinas y advertir a los residentes que se les cortaría el acceso a los servicios médicos si no votaban por Maduro o por sus candidatos.

Muchos dijeron que sus superiores les instruyeron a hacer las mismas amenazas en consultas a puerta cerrada con pacientes que buscaban tratamiento para enfermedades crónicas.

Una exsupervisora cubana indicó que ella y otros trabajadores médicos extranjeros recibieron carnets de votación falsos para participar en una elección. Otra doctora dijo que les ordenaron dar instrucciones precisas sobre el voto a pacientes de edad avanzada cuyas enfermedades los hacían susceptibles a la manipulación.

El avieso reportaje de The New York Times sólo muestra las fotos de dos de los supuestos 16 médicos informantes del periodista (uno viviendo ahora en Chile y otro en Ecuador). Sus únicas otras fuentes de información son el Alcalde opositor de una pequeña villa pesquera venezolana y un connotado participante en numerosos planes anticubanos:José Miguel Vivanco, director del programa para las Américas de Human Rights Watch.

En un magro ejercicio del periodismo que tanto dice defender, NYTimes se olvida del contraste de fuentes y no entrevista a ningún médico cubano en ejercicio en Venezuela, no habla con ningún paciente, no busca la opinión de la dirección de la Brigada Médica Cubana.

La objetividad no es necesaria cuando el claro objetivo propagandístico es alinearse con las fuerzas retrógadas que en Estados Unidos buscan, por cualquier medio, el cambio de régimen en Venezuela. Las mismas que quieren hacer ver al gobierno de Maduro, apoyado por millones de venezolanos, como un régimen que únicamente se sostiene por el apoyo del mando militar y del gobierno cubano.

Son las mismas fuerzas que promovieron el robo descarado del personal médico cubano por el mundo, con el desfachatado programa de Parole, que ahora Marco Rubio y otros pretenden reactivar, en su feroz y fracasada campaña anticubana.

No es extraño entonces que el Senador Marco Rubio haya salido ayer presuroso a tuitear el trabajo del señor Casey como muestra de la “decisiva influencia cubana en Venezuela”
.
La ética con que ha actuado siempre la Revolución Cubana, la formación hipocrática que reciben nuestros médicos, la sensibilidad que se ha formado siempre en esa profesión y en nuestro pueblo, son incompatibles con las historias que se ha inventado The New York Times.

Ningún verdadero médico cubano niega el servicio y mucho menos arriesga la vida de un paciente para lograr fines políticos. No lo hacen en Cuba con los mercenarios financiados por Estados Unidos para intentar destruir a la Revolución, ni lo hicieron con los mercenarios que nos invadieron por la Ciénaga de Zapata en 1961; menos lo harán en el extranjero, a donde han acudido decenas de miles a brindar su solidaridad y su conocimiento.

Todo lo contrario, ha sido ejemplar la ejecutoria de los trabajadores de la salud cubanos en decenas de países del mundo, donde han salvado millones de vidas y han curado a otros millones de pacientes. Ninguna otra nación del planeta atiende a tantos pacientes fuera de sus fronteras. Su labor ha sido premiada por gobiernos, parlamentos, ONG y hasta la mismísima Organización Mundial de la Salud.

Desde que comenzó la colaboración médica cubana en Venezuela han trabajado allí más de 140 000 colaboradores de la salud. Gracias a ese esfuerzo, al finalizar el pasado 2018 se efectuaron 127 millones 168 mil consultas médicas en toda la nación sudamericana y a principios del 2019 se incorporaron dos mil nuevos médicos cubanos a la misión Barrio Adentro para fortalecer la atención sanitaria del pueblo venezolano.
En 55 años, Cuba ha cumplido 600 000 misiones internacionalistas en 164 naciones, en las que han participado más de 400 000 trabajadores de la salud, que en no pocos casos han cumplido esta honrosa tarea en más de una ocasión.

Flaco favor se hace The New York Times publicando estas piezas de propaganda al estilo gobbeliano. La extensa y admirable misión de los médicos cubanos por el mundo es mucho más poderosa que las groseras mentiras.

sábado, 16 de marzo de 2019

CUBA RECHAZA DECISIÓN DE ESTADOS UNIDOS DE OBSTACULIZAR LOS VIAJES DE CIUDADANOS CUBANOS

 
 
 
 
 
CUBA RECHAZA DECISIÓN DE ESTADOS UNIDOS DE OBSTACULIZAR LOS  VIAJES DE CIUDADANOS CUBANOS
 
Declaración del Ministerio de Relaciones Exteriores
 
El 15 de marzo, la Encargada de Negocios de Estados Unidos en La Habana, Mara Tekach, anunció que, a partir del 18 del presente mes, los Estados Unidos reducirán para los ciudadanos cubanos el tiempo de validez de la visa B2 de 5 años a tres meses, con una sola entrada, con el supuesto fin de equiparar estos términos con el tiempo de validez que otorga Cuba a los viajeros estadounidenses. De esta manera, el gobierno de Estados Unidos incrementa los obstáculos para las visitas familiares y con otros propósitos.
 
El Ministerio de Relaciones Exteriores rechaza esta decisión que constituye un obstáculo adicional al   ejercicio del derecho de los ciudadanos cubanos de visitar a sus familiares en ese país. Esta medida se suma al cierre de los servicios del Consulado de Estados Unidos en la Habana, a la interrupción injustificada del otorgamiento de visados a los cubanos, obligándolos a viajar a terceros países sin garantía alguna de otorgamiento de visado, y al incumplimiento de la cuota de visados establecida por los Acuerdos Migratorios. Esta decisión impone también altos costos económicos a los viajes familiares y de intercambio en múltiples áreas.
 
No es cierto que esta decisión haya sido tomada bajo un criterio de reciprocidad, toda vez que Cuba ofrece todas las facilidades para que los ciudadanos estadounidenses, desde cualquier país del mundo, incluidos los propios Estados Unidos,   obtengan un visado,  que se expide al momento,  para viajar a Cuba. Si Estados Unidos realmente desea aplicar la reciprocidad, debería abrir de inmediato su Consulado en La Habana, retomar el proceso de otorgamiento de visados que interrumpió de manera arbitraria e injustificada hace más de un año y eliminar la prohibición a los ciudadanos estadounidenses de viajar libremente a Cuba.
 
Cuba reitera su voluntad de continuar trabajando para garantizar el flujo creciente de viajeros en ambos sentidos de manera regular, ordenada y segura.
 
La Habana,  16 de marzo de 2019

viernes, 15 de marzo de 2019

Un hijo de sus propias ambiciones


A sus aclamadas cualidades de mentiroso, manipulador, traficante de influencias, podemos agregar la de oportunista e intimidador, ya que no es nada tímido a la hora de gritar improperios y amenazar a un jefe de Estado como Nicolás Maduro
Foto: Tomada de Internet
Cuando comencé a indagar sobre este personaje político pensé que el eje central de este comentario sería su pasado y el de su familia con las drogas. Sin embargo, Marco Rubio está vinculado a otras realidades tan poco halagüeñas como la primera.

Este senador republicano nació en Miami en el año 1971. Sus padres, inmigrantes de la Mayor de las Antillas, marcharon hacia Estados Unidos antes del triunfo de la Revolución.

Sin embargo, y a pesar de que algunos periódicos de «Gringolandia» han aludido en algún momento a los días en que su familia se codeaba con importantes figuras de las drogas, en su biografía  An American Son, publicada en el año 2012, la referencia a estos eventos es más bien una leve brisa, poco comparable con la tempestad que encierra la verdad sobre el asunto.

Pero, en 2015, según publica Misión Verdad, una nota del Washington Post puso en la palestra pública la relación de su hermana mayor Bárbara con una reconocida figura dentro de la venta ilegal de estupefacientes, Orlando Cicilia.

Esta misma fuente comenta que Cicilia trabajaba para Mario Tabraue, otro traficante, de gran notoriedad dentro de la venta de cocaína, comparado en ocasiones con Pablo Escobar.

Ambas figuras fueron detenidas por los federales y enfrentaron fuertes cargos.

A pesar de la frase que reza «los hijos no tienen que pagar los pecados de los padres», de lo que se le acusa a Rubio no es de ser cómplice de estos actos.

En aquel entonces, efectivamente, como siempre defiende su portavoz Todd Harris, Marco solo tenía 16 años.
Pero luego de 30 años y…, de lo que se le acusa es de tráfico de influencias, delito que niega siempre con vehemencia el senador de la Florida, pero que no logra ser creíble.

Orlando Cicilia, condenado a más de 35 años de cárcel luego de que se probara su asociación con el crimen, salió en libertad plena luego de 12 años de prisión.

A su vez, Mario Tabraue, antiguo jefe de Orlando, condenado a más de cien años de cárcel por sus deplorables acciones, logró volver a su vida habitual luego de poco más de 15 años. En ambos ejemplos los aludidos lograron la absolución cuatro días después de que Rubio fuera investido como diputado. ¿Coincidencia?

OTROS TEMAS… IGUAL DE POLÉMICOS
En el año 2018 la prensa del estado de Florida, al igual que muchos de sus votantes, expresaron su enojo ante la incondicionalidad del Senador a la causa de la Asociación Nacional del Rifle (NRA).

Luego del tiroteo en Parkland el padre de una de las víctimas lo confrontó: «Senador Rubio, mi hija corrió por el pasillo de su escuela, le dispararon en la espalda con un arma de asalto, es demasiado fácil de comprar, es un arma de guerra». Este afligido hombre llamado Fred Guttenberg puso en tela de juicio la actuación del funcionario Rubio. Sin embargo, días después el «apenado» Senador presentó un proyecto para eliminar la prohibición de las armas de asalto en Washington y la legalización de la venta de estos artefactos a adultos jóvenes.

Por lo visto, pesan más las grandes contribuciones que pueden realizar grupos de poder, que la decencia y la empatía hacia quienes han sufrido las consecuencias de los proyectiles.

SUS ASIGNATURAS PENDIENTES

No es un secreto que en la actual administración norteamericana, con Trump a la cabeza, las acciones en detrimento de las relaciones entre Cuba y EE. UU. han subido en nivel e intensidad.

Y es que ante las «geniales ideas» de un cabecilla de Estado como Trump, los oportunistas como Rubio encuentran el camino. El senador de la Florida sabe que en EE. UU. enfrentar a Cuba es un negocio extremadamente rentable, del cual pretende seguir viviendo y enriqueciendo su legado.

Actualmente, la denominada «troika del mal» de la que, en opinión de la administración estadounidense, forman parte Cuba, Venezuela y Nicaragua, es atacada por la verdadera triada del terror: Bolton, Pompeo y Pence… y, claro está, también Marco Rubio.

A sus aclamadas cualidades de mentiroso, manipulador, traficante de influencias, podemos agregar la de oportunista e intimidador, ya que no es nada tímido a la hora de gritar improperios y amenazar a un jefe de Estado como Nicolás Maduro.

Marco Rubio solo logra apoyar la imagen de políticos corruptos e influenciables por poder y dinero. Él ¿un hijo americano? ¿cubano? Lo dudo, es hijo de sí mismo, de sus propias ambiciones.

miércoles, 13 de marzo de 2019

Trump, los demócratas y el juicio político

 


Por Luis Beatón *
Al menos el 64 por ciento de personas encuestadas considera que el presidente Donald Trump cometió crímenes antes de asumir la presidencia de Estados Unidos.


Pero, el resultado de los sondeos es algo difícil de probar, a no ser que la investigación seguida por el fiscal especial Robert Mueller aporte elementos probatorios convincentes para obligar al Partido Demócrata a ir por el mandatario y no quedar mal parado en un proceso que puede servir la mesa a Trump para otros cuatro años en la Casa Blanca.

Análisis, comentarios y especulaciones afloran ahora sobre el llamado impeachment o juicio político, y si favorece a uno u otro partido rumbo a los comicios de 2020.

Según el diario digital Politico para los del llamado partido azul (demócratas) impugnar al presidente es inevitable e imposible.

La agrupación anticipa que reunirá abundante evidencia de crímenes graves y faltas menores por parte del presidente, pero están preocupados por lo que deben hacer, temerosos de que sus esfuerzos sean contraproducentes y terminen ayudando a Trump, indica el diario.

Usted no quiere dividir al país, por lo que debe pensar que tiene un caso tal que una vez terminado de presentar, hay suficiente gente que entiende que tuvo que hacerlo, opinó el presidente del Comité Judicial de la Cámara de Representantes, Jerry Nadler (D- Nueva York), quien tiene el poder de iniciar un proceso de juicio político.

Los republicanos se mantienen leales al presidente y respaldan en gran parte sus críticas a la investigación del abogado especial Mueller y otras pesquisas que involucran al mandatario y sus asociados.

En estos momentos, los azules enfrentan serias y profundas divisiones sobre si sus esfuerzos podrían terminar ayudando a Trump a ganar un segundo mandato y muchos abogan por seguir las pesquisas y tratar de airear elementos para que sean los votantes quienes se manifiesten en las urnas en 2020.

Hasta ahora y pese a presiones de legisladores liberales, la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi (D-California) y los presidentes de los comités abordan el tema de la acusación con cautela, argumentando que se debe considerar solo después de que se completen las diversas investigaciones federales y del Congreso.

No obstante, algunos parlamentarios como Maxine Waters (D-California), quien preside el Comité de Servicios Financieros de la Cámara de Representantes, opinan que existen pruebas suficientes para acusar a Trump.

Pocos quieren estar en el puesto de Pelosi, pues la tercera figura más poderosa del país enfrentará fuertes presiones si algo sustantivo surge de las pesquisas y se ve obligada a lanzar el procedimiento de juicio político sin contar con el apoyo de al menos 20 republicanos del Senado.

Analistas plantean que los demócratas están preocupados por si deben confiar en los republicanos y avanzar en el proceso empujado por los liberales en la Cámara baja, o si deben impugnar a Trump y arriesgarse a una reacción política que les pudiera restar apoyo para los comicios presidenciales de 2020.

El representante Stephen Lynch (D-Massachusetts), del Comité de Supervisión y Reforma, aboga por dejar de lado las conveniencias políticas y plantea que 'si la evidencia apunta a esos crímenes, debemos perseguirlos, sin importar si el recuento al final del día será suficiente para tener éxito en el juicio político'.

No obstante, la alta dirigencia no parece dispuesta a arriesgarse en un asunto que no aporte nada al partido y argumentan avanzarán el proceso de juicio político solo cuando la opinión pública se vuelva contra el mandatario de tal manera que ya no sea políticamente ventajoso para los republicanos seguir con su líder.

Evidentemente hay temor entre el partido azul de llevar un proceso para sacar a Trump de la Casa Blanca que sea visto por los electores como una manipulación y ser acusados de ir contra la voluntad expresada en las urnas.

En un país dividido, el juicio político lo es también en las filas de los demócratas. Algunos apuestan por arriesgar pero los más veteranos piden paciencia mientras esperan que el presidente caiga por el peso de sus propios errores, advirtiendo que un proceso de destitución puede destrozar al país sin una evidencia irrefutable de irregularidades.

Para hacer un caso contra el ocupante de la Casa Blanca tienen que probar hechos y no basar las acusaciones en supuestos, algo que podría lograrse si las pesquisas de Mueller aportan los elementos necesarios.

Por otra parte, en las filas republicanas reina escepticismo sobre si las investigaciones aportarán algo más que propaganda contra su presidente.

Al valorar esta situación la representante Raja Krishnamoorthi (D-Illinois) manifiesta que si se lanza el juicio político y este muere en el Senado, entonces Trump se presentará como víctima y pedirá su reivindicación, lo que casi le abrirá las puertas a un segundo mandato.

La idea del juicio fue apuntalada recientemente por las declaraciones de Robert Cohen, exabogado de Trump, quien aportó una serie de elementos que de probarse darían sustancia al proceso pero hay que verificarle a Trump sus presuntas fechorías.

Aunque el caso Trump es más complejo que el del republicano Richard Nixon cuando se vio obligado a renunciar por las pruebas en su contra, los peligros evidentes de mantener a un presidente fuera de control en el cargo bien podría impulsar a los políticos en ambos partidos, no sin controversia, a querer hacer un trato para sacarlo.

La gran interrogante planteada es cuándo y cómo esos sectores estadounidenses darán el tiro final a esta administración y cuál será la protección legal que se buscará el mandatario para evitar comparecer ante la justicia si hay elementos probatorios.

No obstante, ahora el impeachment solo es algo que se valora, y mientras tanto, Trump se fortalece hacia las elecciones de 2020, más cuando la economía le sonríe.

lunes, 11 de marzo de 2019

Condena Cuba el sabotaje terrorista contra el sistema eléctrico de Venezuela


Condena Cuba el sabotaje terrorista contra el sistema eléctrico de Venezuela



Declaración del Gobierno Revolucionario. Foto: Minrex.

El Gobierno Revolucionario condena enérgicamente el sabotaje al suministro de electricidad en Venezuela, que constituye un acto terrorista, dirigido a dañar a la población indefensa de toda una nación, para utilizarla como rehén en la guerra no convencional desatada por los Estados Unidos contra el gobierno legítimo que preside el compañero Nicolás Maduro Moros y la unión cívico-militar del pueblo bolivariano y chavista.

Políticos estadounidenses se han apresurado a celebrar un acto que priva a la población de un servicio básico fundamental, deja hospitales sin la energía necesaria para operar, interrumpe otros servicios elementales indispensables en la vida cotidiana, como la alimentación, el suministro de agua, el transporte, las comunicaciones, la seguridad pública, el comercio, las transacciones bancarias y el pago por tarjetas; afecta el trabajo en general e impide el funcionamiento de las escuelas y universidades.

La secuencia y modalidad de los hechos recuerda el sabotaje realizado a la industria petrolera en 2002, perpetrado entonces por una empresa estadounidense propietaria y operadora del sistema automatizado de producción, refinación, transportación y distribución de la producción.

Se suma, además, a la guerra económica y financiera despiadada a la que se somete a Venezuela, con el claro objetivo de vencer por carencias y privaciones la voluntad política y soberana de un pueblo que no se ha dejado doblegar.

Se trata de una escalada en la guerra no convencional liderada por el gobierno de los Estados Unidos contra ese país hermano que se desarrolla tras el fracaso de la provocación montada el pasado 23 de febrero con el intento de ingresar por la fuerza una supuesta ayuda humanitaria a Venezuela, desafiando a las autoridades legítimas del país, en violación del Derecho Internacional y de las normas y principios de la Carta de las Naciones Unidas, con el objetivo de provocar muertes y violencia en gran escala como pretexto para una “intervención humanitaria”.
La experiencia de la propia historia de Cuba y de otros países de la región enseña que estas acciones son el preludio de actos violentos de mayor envergadura, como fue la invasión armada de Playa Girón en 1961. La comunidad internacional tiene suficientes evidencias para estar sobre aviso.

El usurpador y autoproclamado “presidente” creado por Estados Unidos dijo públicamente que, cuando llegue el momento, invocaría el artículo 187 de la Constitución para autorizar el empleo de misiones militares extranjeras en el país y repitió exactamente la misma frase que sus mentores estadounidenses utilizan: “Todas las opciones están sobre la mesa”. Solo falta que reciba la orden desde Washington, pues se conoce que en su periplo por América del Sur ya solicitó a ciertos gobiernos apoyo para una intervención militar en su país.

La ofensiva contra Venezuela se acompaña de una feroz campaña de propaganda macartista y mentiras coordinada por el Asesor de Seguridad Nacional de ese país, John Bolton, como pretexto para la aplicación por la fuerza de la Doctrina Monroe, acompañado activamente por el Senador anticubano Marco Rubio, quien con el uso frenético de las redes sociales, evidencia su atención e involucramiento personal y conspirativo, en las maniobras contra Venezuela.

Entre los más persistentes y desvergonzados pronunciamientos, está la calumnia de que Cuba tiene “entre 20 y 25 mil efectivos militares en Venezuela”, que “ejercen dominio” en ese país hermano y soberano, y que “tienen amenazados” a los integrantes de la gloriosa y combativa Fuerza Armada Nacional Bolivariana. Cuba rechaza de manera categórica esa mentira, como rechaza con igual firmeza toda insinuación de que existe algún grado de subordinación política de Venezuela a Cuba o de Cuba a Venezuela.

John Bolton es un mentiroso reconocido, con credenciales de larga data. Este funcionario fue quien en 2002 acusó a Cuba de poseer un programa de desarrollo de armas biológicas, falacia desmentida públicamente por quien era entonces su jefe, el ex Secretario de Estado Colin Powell, y por el ex Presidente James Carter. El infundio provocó, además, que Bolton fuera sometido a una investigación por el Congreso de los Estados Unidos.

Bolton asimismo estuvo entre los promotores de la mentira de que el gobierno de Iraq poseía en 2003 armas de destrucción masiva y un programa para desarrollarlas, la que, repetida a todos los niveles del gobierno estadounidense y amplificada por los grandes medios de comunicación, sirvió de pretexto para la agresión y ocupación militar de ese país del Medio Oriente por parte de los Estados Unidos, a un precio de cerca de un millón de muertos y millones de desplazados iraquíes, además de miles de soldados estadounidenses fallecidos y heridos durante la campaña militar cuyo objetivo fue también el petróleo.

Como se ha difundido públicamente, y las personas honestas e informadas conocen, la relación bilateral entre Cuba y Venezuela se basa en el respeto mutuo, en la verdadera solidaridad, en el común compromiso bolivariano y martiano, fidelista y chavista, con la integración de “Nuestra América”, independiente y soberana; en la voluntad de practicar la cooperación complementaria entre los pueblos del Sur, y en el empeño de aplicar y defender la Proclama de América Latina y el Caribe como Zona de Paz.

En los proyectos del Convenio Integral de Cooperación, suscritos entre ambos países, participan poco más de 20 mil cubanos, la mayoría mujeres, el 96% de los cuales están dedicados a la prestación de servicios de salud a la población, y otros que laboran en sectores como educación, cultura, deporte y agroalimentario.
El impacto acumulado en Venezuela de esa cooperación, por solo citar unos datos, ayudó a salvar 1 473 117 vidas, a realizar 717 029 310 exámenes de diagnóstico médico, a dar atención oftalmológica a 62 031 309 de personas, a administrar 12 915 648 de vacunas contra el sarampión y la tuberculosis, a lo que se puede sumar 3 095 546 de alfabetizados.

Es totalmente falso que Cuba esté participando en operaciones de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana o los servicios de Seguridad. Se trata de una calumnia difundida deliberadamente por el Gobierno de los Estados Unidos. Cuando Bolton, otros políticos y funcionarios del gobierno estadounidense la esgrimen, mienten deliberadamente con agresivos fines políticos, pues cuentan con datos e informaciones suficientes y conocen la verdad.

Cuba no interviene en los asuntos internos de Venezuela, como Venezuela no interviene en los de Cuba.
A diferencia de los Estados Unidos que tiene unas ochenta bases militares en América Latina y el Caribe, incluida la que usurpa territorio cubano en Guantánamo, y unas ochocientas en el planeta que disponen de más de 250 mil soldados; Cuba no tiene ninguna en país alguno, ni especialistas en tortura y represión policial, ni cárceles secretas, ni fuerzas navales o aéreas merodeando las costas y el espacio aéreo inmediato de Estados soberanos ni satélites observando cada detalle.

Con la mentira, el imperialismo promovió el sangriento golpe de estado de Augusto Pinochet en Chile, y muchos otros golpes de estado y dictaduras represivas en la región. Con mentiras se asesinó a más de 10 mil ciudadanos indefensos en la invasión militar a Panamá de diciembre de 1989. Con ellas se provocó la agresión militar y la desestabilización de Libia.

Con mentiras fue que Estados Unidos y otras potencias mantuvieron hasta última hora el pleno respaldo al oprobioso régimen del apartheid en Sudáfrica.

El Gobierno Revolucionario advierte y denuncia que la tendencia a mentir sin límite ni freno alguno de parte del gobierno de los Estados Unidos tuvo ya peligrosas consecuencias en el pasado que podrían repetirse en la actualidad.

¿Rebelión republicana contra Donald Trump?


Existen cada vez más evidencias del soterrado enfrentamiento entre Trump y la cúpula conservadora, así como de la creciente división interna que sufre el Partido Republicano a propósito de la política errática de Washington
Foto: AP
La declaración de emergencia nacional por parte del presidente de Estados Unidos escandalizó a ciertos sectores moderados del partido que apoya al inquilino de la Casa Blanca. Rand Paul, representante republicano por Kentucky en la Cámara Alta, Susan Collins (Maine), Thom Tillis (Carolina del Norte) y Lisa Murkowski (Alaska), han mostrado su rechazo con el actuar del Presidente.

Existen cada vez más evidencias del soterrado enfrentamiento entre Trump y la cúpula conservadora, así como de la creciente división interna que sufre el Partido Republicano a propósito de la política errática de Washington.

El jefe del Mando Central de EE.UU., general Joseph Votel, volvió a contradecir las palabras de Trump sobre la derrota total del Estado Islámico (EI). «Pese a la merma de la organización terrorista, el combate contra el extremismo violento del ei está lejos de haber acabado», opinó el general Votel ante el Comité de Servicios Armados de la Cámara de Representantes.

«La liberación de los territorios sirios de la ocupación terrorista es un logro militar monumental, pero la organización terrorista conserva su capacidad de reacción», declaró Votel y aseguró que hace un mes ya dijo que no fue consultado antes de que el presidente Donald Trump realizara el anuncio sobre la retirada de las tropas de Siria.

Con estas declaraciones el jefe de las tropas estadounidenses vuelve a contradecir las declaraciones de Trump, que se ha jactado en varias ocasiones de haber derrotado al Estado Islámico en Siria.

Por otra parte, la reciente noticia de la renuncia de la secretaria de la Fuerza Aérea de EE. UU., Heather Wilson, confirmada el viernes por la Fuerza Aérea a través de un comunicado, hace crecer las dudas acerca de la estabilidad de la administración sesgada por las dimisiones de altos funcionarios del gobierno.

El Comité Judicial de la Cámara de Representantes de EE. UU. comenzó una nueva investigación contra Donald Trump, su Administración, su campaña electoral y sus negocios privados, por supuesta obstrucción a la Justicia, corrupción y abuso de poder, informó AP.

El presidente del Comité, el demócrata Jerrold Nadler, ha anunciado que están enviando solicitudes de documentos a 81 personas vinculadas a Trump, como primer paso para «preparar el registro público» para la investigación, refirió RT.

sábado, 9 de marzo de 2019

Fuego investigativo contra Trump



 Publicado por
Tomado del Canal caribe.



Este sábado especulábamos sobre cuáles podrían ser los pasos futuros de Trump y su equipo frente a la arremetida legal que sufre el presidente, recordemos que son alrededor de 17 investigaciones que se llevan en su contra, las recientes declaraciones de su exabogado y hombre de confianza, Michael Cohen echaron más leña al fuego, y están por conocerse los resultados de las investigaciones del fiscal especial que indaga sobre estos supuestos delitos, y para más dramatismo, la Cámara de Representantes está en manos demócratas, algunos de ellos ansiosos por aplicar un impeachment contra Trump y sacarlo de la Casa Blanca. Todo esto en un contexto electoral que obliga al mandatario a ponerse a la ofensiva, y hablamos específicamente que lo más probable era que Trump se corriera más al conservadurismo para mantener su base electoral y que buscara uno o más conflictos internos o externos para desviar la atención.

Pues bien, todo parece indicar que ya emerge esa estrategia y el magnate presidente tiene un coco, un diablo al cual presentarle el crucifijo republicano, se trata de un viejo pretexto ¿cuál? El socialismo. Fíjense, vamos por pasos, esta semana se celebró la Conferencia de Acción Política Conservadora, y según la agencia AFP, el tema principal fue un video de cinco minutos contra lo que ellos llaman los socialistas demócratas en el Congreso, y por supuesto, el audiovisual intentaba mostrar al socialismo como el mayor peligro para la grandeza americana. Ojo, importante tener en cuenta, estábamos hablando de un supuesto socialismo a lo estadounidense, que nada, absolutamente nada tiene que ver con el sistema que se intenta construir en parte de América Latina o que se intenta defender en Cuba.

Ahora bien. ¿Es una buena estrategia? Sin duda alguna, desempolvar esta vieja fobia es una jugada inteligente por varias razones; primero, los estadounidenses vivieron décadas bajo la propaganda de la Guerra Fría y la élite logró que palabras como comunismo y socialismo se convirtieran en ácido para los odios de buena parte de esa sociedad, por lo tanto, se trae a debate un tema sobre el cual hay un camino adelantado lleno de muchos prejuicios y miedos. Segundo, no hay mejor estigma para dañar al Partido Demócrata y algunas de sus figuras como Bernie Sanders y Alexandria Ocaso-Cortez, que se han corrido a los extremos debido a la crisis del sistema político, de la cual Trump también fue resultado; y tercero, para la base electoral de Trump el miedo a la supuesta amenaza socialista es tan grande, pero tan grande, que podría echar a un lado los escándalos del magnate si lo ven como el hombre fuerte para encarar el desafío.

Pero hay un detalle interesante. ¿Quién participó en esta cita que hablábamos? No fue Trump, fue el vicepresidente Mike Pence, el paladín antisocialista que mostró su cara también en todo el plan fracasado contra Venezuela. Esto nos hace sospechar que, frente a los peligros que corre Trump, el vicepresidente podría ser la carta que maneje el Partido Republicano para 2020, un hombre aclamado por el ultraconservadurismo estadounidense y que han mantenido alejado, con toda intensión y en la medida de lo posible, de las mayores torpezas de Trump. A veinte meses de las elecciones, el panorama en Estados Unidos está sumamente interesante, y creo que en el bando demócrata están los mayores desafíos, sobre eso podemos analizar el próximo domingo.

miércoles, 6 de marzo de 2019

Bernard Sanders y un mea culpa deseado


No se sabe si Bernard Sanders llegará a ser presidente de Estados Unidos, pero indicios ha dado de tener esa aspiración
Sanders es portador de la ideología que llegó a los futuros Estados Unidos con el Mayflower y se entronizó con el positivismo allí arraigado. Foto: Reuters
No se sabe si Bernard Sanders llegará a ser presidente de Estados Unidos, pero indicios ha dado de tener esa aspiración. En todo caso, el autor del presente artículo apunta que no ve por qué darle el tratamiento de Bernie en tierras donde achicar el nombre se asocia al afecto.

En la tradición anglosajona parece cosa de rutina, afín a un pragmatismo que se expresa en su lengua y busca ahorrar caracteres y fonemas. Pero ello no debe seguirse miméticamente en nuestras tierras, a las que nada invita a pensar con cariño en los jerarcas yanquis como si equivaliesen a Guille, Jacobito, Donaldito y otros diminutivos por el estilo. No se añade Barackito porque sonaría muy raro, pero tal vez al aludido le habría satisfecho que se le diera ese nombre, para ornar también con él la imagen edulcorada que procuró dar de sí, en lo que tuvo éxito.

A Sanders no le costará gran esfuerzo lograr una imagen mejor que la de Donald Trump. Lo ayudan las groserías de este último, y la gran cantidad de personas a quienes por pobreza, condición étnica, género, preferencia sexual, situación migratoria y otras desventajas les urge que la nación tome derroteros distintos de los que promueve el actual césar. Pero nadie ha de olvidar que –como sus predecesores, incluidos el patán Donald y el también guerrerista Obama, quien tuvo la inmoral patente de corso del Premio Nobel de la Paz– Sanders hará lo que los rectores del imperio le permitan o le ordenen hacer. Y probablemente se sienta complacido con ello.

Una buena imagen lo beneficiaría dentro y fuera de su país. En Cuba lo ayudaría que las fuerzas dominantes de la voraz potencia le propiciaran encaminar ofrecimientos como los manejados por Obama. El pueblo cubano no quiere vivir de ilusiones, pero sufre las penurias que le ha ocasionado –más que las agresiones armadas y el terrorismo patrocinados por los gobernantes de Estados Unidos– el bloqueo económico, financiero y comercial que esa potencia le aplica desde hace seis décadas. Naturalmente, en tales circunstancias el aflojamiento del bloqueo le aliviaría la vida.

Por ello, aunque insuficientes y tímidos, los anuncios de Obama de que trabajaría en pos de la normalización de relaciones entre los dos países, generaron expectativas estimulantes. La posibilidad de que esos anuncios se hicieran realidad era tan importante para Cuba que le daba razones para recibirlos con entusiasmo. Pero hubo quienes, con un raro arte de deducir, concluyeron que las promesas de Obama eran casi irreversibles.

Menos mal que usaron ese adverbio menudo, casi, porque bastó un cambio de césar para que lo tratado con Obama se revirtiera en escaso tiempo. Tal experiencia constituirá un antídoto contra nuevas ilusiones infundadas, por muy nobles que pudieran ser; «pero no están de más ciertos cuidados», escribió en otras circunstancias un poeta.

Ahora parece que hay quienes asumen que Sanders no es solo un político interesante, sino que ha lanzado ideas renovadoras como en el gobierno de su nación no las ha habido de Roosevelt para acá. ¿Será sensato olvidar que la imagen de ese presidente se edulcoró con la promoción, en los años 30 del siglo XX, de una supuesta buena vecindad? ¿Buena vecina para nuestra América la potencia que Simón Bolívar, en 1829, dijo que parecía destinada por la providencia a plagarla de miseria en nombre de la libertad? A la mente vienen los años 60 de aquel siglo, con John F. Kennedy y la Alianza para el Progreso.

Es prematuro afirmar o negar que Sanders llegará a ser presidente de Estados Unidos, aunque tiene mucho más que un Buick. Pero todavía más seguro es que, de alojarse en la Casa Blanca, tendría que obedecer a los mandones mayores de su país, entre los cuales descuellan los magnates de las armas y la guerra. Así ocurriría aunque él fuera un comunista inconfeso, algo que nada autoriza a imaginar, ¿o sí?

Ya tiene de su lado la aureola de «socialista». Si se entiende que lo es –como una de las acepciones del término– porque ha expresado preocupación ante problemas sociales de su país, valga el rótulo, aunque de todos modos sería engañoso. Y si se hace porque se le regala ese título a la socialdemocracia de su nación, habría que recordar dos cosas: en todas partes del mundo la socialdemocracia sigue viviendo a expensas del socialismo, dificultándolo cada vez más; y la de Sanders sería una socialdemocracia imperialista.

No es cuestión de malabarismos verbales. Sanders es portador de la ideología que llegó a los futuros Estados Unidos con el Mayflower y se entronizó con el positivismo allí arraigado. Como en otros, en ese político todo pasa por el mesianismo según el cual los ciudadanos de su país (los blancos y ricos, léase) son superiores. «Dios habla con ellos», según decía George W. Bush que le ocurría a él, y están llamados a dominar al mundo para engrandecerlo con sus valores: imponerle sus aspiraciones y dominarlo.

Sanders, y al igual que él otra exponente del supuesto socialismo de su país –la joven y mediática Alexandria Ocasio-Cortez–, ha apoyado los planes de agresión contra Venezuela. Cuba recordará las estratagemas del Obama que vino para promover su campaña en pos de conseguir aquí con la falaz zanahoria lo que no ha logrado el garrote imperialista desde que la Revolución triunfó, y de La Habana partió para Buenos Aires. Allí siguió orquestando, con su lacayo local y con otros, la campaña enfilada a derrocar el proyecto bolivariano que hoy continúa desafiando y venciendo las criminales maniobras del imperio empeñado en aplastarlo.

¡Ah!, ¿que Obama y Sanders son demócratas y el patán Donald es republicano? En crónica fechada en Nueva York el 8 de diciembre de 1886 José Martí escribió: «El partido republicano, desacreditado con justicia por su abuso del gobierno, su intolerancia arrogante, su sistema de contribuciones excesivas, su mal reparto del sobrante del tesoro y de las tierras públicas, su falsificación sistemática del voto, su complicidad con las empresas poderosas, su desdén de los intereses de la mayoría, hubiera quedado sin duda por mucho tiempo fuera de capacidad para restablecerse en el poder, si el partido demócrata que le sucede no hubiera demostrado su confusión en los asuntos de resolución urgente, su imprevisión e indiferencia en las cuestiones esenciales que inquietan a la nación, y su afán predominante de apoderarse, a semejanza de los republicanos, de los empleos públicos».

Con la limpieza de principios que caracteriza a Cuba, y le viene de Martí, Fidel Castro y otros fundadores, ella necesita aprovechar las fisuras que un cambio de política en la Casa Blanca pudiera introducir en el bloqueo que intenta asfixiarla. También sabiamente se ha dicho que es difícil imaginar –¡pero no es imposible!– una política peor contra ella que la sostenida por la actual administración estadounidense, salvo que llegue a la presidencia de esa nación alguien como el abominable Marco Rubio.

Pero la propia limpieza aludida animará siempre a Cuba a no sobreponer sus intereses nacionales a los derechos de otros pueblos. Fidel dio una clara lección de esa conducta cuando no aceptó mejoras para su pueblo a cambio de renunciar a la solidaridad con la causa independentista de Puerto Rico.

Hoy el imperialismo urde contra Venezuela planes más feroces aún, si cabe, que los impuestos a la hermana Antilla desde 1898: entre otras razones, porque el subsuelo de esta última no alberga las colosales reservas de petróleo que existen en el venezolano.

En Cuba, ¿qué no sabremos del monstruo en cuyas entrañas vivió Martí, quien tan temprana, resuelta, lúcida y combativamente lo denunció, e intentó impedir la consumación de sus designios? Huelga decir que este artículo no se escribe desde perspectivas estadounidenses, sino desde la defensa de los derechos y justas aspiraciones de Cuba, donde la mayoría de la población sabe lo que está en juego, y no se ilusionará con análisis que, aunque se proclamaran mayoritarios, no rebasan puntos de vista de minorías ganadas por los cantos de la política de Estados Unidos.

Si allí se quiere encontrar una verdadera fuerza de izquierda, búsquese fuera del falaz bipartidismo que representa esencialmente los intereses de un solo partido: el de los poderosos, llámense republicanos o demócratas. Aun así, si Bernard Sanders llegara a la Casa Blanca y tuviese una conducta que dejara sin razones lo aquí escrito, el autor no vacilaría en declarar: ¡Mea culpa! Hasta lo quisiera, por el significado que tendrían los hechos. Pero se sabe con razón para exclamar junto a la gran mayoría de su pueblo: ¡Aquí no se rinde nadie, ni se deja engañar!

¿Hasta cuándo creer que Guaidó existe?


Publicada: miércoles, 6 de marzo de 2019 12:57
¿Por qué los Estados Unidos, aparentemente, sin pensarlo ni dudarlo, apoyaron a un personaje deslustrado y anónimo como Juan Guaidó?

¿Fue sólo en razón a que este, aunque procedía de un partido minoritario y le hacía un reemplazo de urgencia a Leopoldo López, el rico y revoltoso jefe encarcelado, fungía como presidente de una Asamblea Nacional colateral y cuyos objetivos de casualidad coincidieron?

¿O, acaso, Guaidó no era tan anónimo como creímos, o no lo era tanto para los veteranos halcones de Washington, quienes vieron en el curriculum sus andanzas por la Universidad George Washington, en la capital estadounidense, desde hace doce años, y por el Centro de Acción No Violenta Aplicada y de Estrategias (Centre for Applied Nonviolent Action and Strategies, CANVAS), en Belgrado? (Grayzone, 2019)

¿De cuál manera encaja que los profesores de este kindergarten encubierto financiado por la NED y la USAID, los laureados serbios Srdja Popovic y Slobodan Djinovic, que pregonan una paz de doble filo desde que tumbaron a mazazos a Slobodan Milosevic, a la vez aseveren que la ferocidad de los exalumnos en Venezuela es apenas un estancamiento en el camino al cambio cercano? (Popovic y Djinovic, 2017)
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¿Estancamiento no se relaciona con suspender o detener el curso de algo y no, por el contrario, con alentarlo y darle rienda suelta a punta de barbaridades, pedreas, y la quema de instalaciones y personas?

¿La acción no violenta aplicada, entonces, no es la paz? ¿Las estrategias de las que se habla no son, por tanto, para lograr la democracia? ¿Les quedó gustando esa búsqueda del debilitamiento regional de los contrarios a Washington, lo que en su entraña fueron las mal llamadas “primaveras árabes” a las que se consagraron, y que terminaron siendo unos remedios peores que la enfermedad?

¿Qué tan global y qué tanto de local?
¿Las maniobras de boicot y destrucción de Venezuela son otro rebuscado, pero juicioso, método de ataque a China, a Rusia y a Irán? ¿Quién se atreve a sostener, a estas alturas, que no hacen parte de la estrategia global contra las mayores resistencias que tiene la hegemonía estadounidense hoy en día?

¿El magnicidio planificado contra el presidente Maduro con drones cargados con C4 no habría de dar al desmadre? ¿Qué materias incendiarias pasaría Guaidó con honores en la CIA y cuáles las de valores y ética que cruzó raspando en la UCB?

¿Sería que en el afán por tener a buen recaudo las reservas petroleras más grandes del planeta, unas de las más grandes despensas auríferas, de gas y de bosque artificial maderable del globo, al igual que vastos yacimientos de coltán,sílice, torio, diamantes, bauxita, níquel, hierro, cobre, rocas fosfóricas, basalto, caolín, feldespato, mármol y granito,los Estados Unidos estaban prestos a dejarse engatusar por el diablo y lo hicieron por unos jóvenes brutales y mediocres?

¿Le creemos a Bolton en Fox News cuando afirma que las compañías estadounidenses  se beneficiarían mucho con el petróleo venezolano (Grayzone, 2019), cuya participación ya se reparten, o nos tragamos la idea de que su país será autosuficiente gracias al fracking, una mentira en la pregonada proyección (Hughes, 2018) y un mecanismo costoso en todo sentido: en inversión, en lo social y en lo ambiental?

¿Cómo es eso de que los Estados Unidos mantienen las sanciones contra Venezuela hasta que el país regrese al orden democrático y a fin de prevenir la corrupción, y que para lograrlo recurren precisamente al soborno a militares (una de las peores formas de la corrupción), y se saltan las talanqueras constitucionales del país y de paso las jurisdiccionales del orden internacional?

¿Qué democracia es aquella de la que ellos mismos carecen y que, sin embargo, van desperdigando por el mundo entre excusas y a punta de misiles y masacres? ¿Adónde están los límites de la hipocresía de un país que consigna por doquier, de la Declaración de Independencia a la Constitución y las sucesivas enmiendas, palabras contradichas en su esencia de nación: libertad, y es un país de esclavos; igualdad, y es la ausencia de equidad; justicia, y es el desborde de las iniquidades; pluralismo, y hasta en los ánimos prevalece la uniformidad puritana?

¿Será más dañino el halcón alicaído?

¿Qué ventajas vería Trump, emperador del poco sacro imperio estadounidense, en una oposición cuyo mérito ha sido provocar guarimbas fatales cada dos o tres años y ostentar la cifra récord de perder dieciocho elecciones en veinte años? ¿Qué reservada perfección distinguieron los consejeros áulicos de la Casa Blanca en Guaidó, que los demás mortales ver aún no pueden?

¿Y cómo es que un racista por herencia y un supremacista blanco redomado por convicciones como Trump avala al mulato Guaidó? ¿Algo oscuro habrá en el esguince a la fe además del renegrido petróleo extra pesado de la Franja del Orinoco?

¿Quién engañó a quién en el entramado de engaños que urdían contra el presidente Maduro y su gobierno? ¿El obsesivo compulsivo consejero de Seguridad Nacional estadounidense John Bolton timó al tirapiedras Guaidó?
¿Pasa que Bolton ya no es el Bolton de 2003, el artífice sepulcral de Irak, y Guaidó nunca será el Guaidó que creyó que podría llegar a ser de grande? ¿Hasta cuándo hará Juan Bollton de John Guaidó? ¿O Guaidó es un tolerable estereotipo blackface (rostro pintado de negro)?

¿Un pupilo inexperto consiguió enredar a un zorro viejo como Elliot Abrams? ¿Había trampas en el coto de caza llamado Venezuela y el viejo predador cayó en ellas? ¿Será que del Elliot de los ochenta ha quedado un Abrams tres décadas más viejo y unos palmos menos zorro?

¿Socios en dependencia o aliados dependientes?

¿De cuándo acá a los Estados Unidos les dio por confiar en una oposición que es incapaz de confiar en ella misma? ¿No vieron el animal pluricelular que es y pervive gracias a lacontinua división de células y a las voracidades de poder de unos líderes encarcelados por violentos o exiliados por corruptos?

¿A los estadounidenses no les llamó la atención el hecho de que la Mesa de Unidad Democrática (MUD), la mezcolanza de 35 partidos que obtuvo la mayoría en la Asamblea Nacional de donde salió Guaidó, acabó disuelta y con los cofrades de nuevo transformados en las facciones incompatibles de siempre?
¿Cuánto durarán las alianzas pegadas con babas y qué tanto les servirán a los estadounidenses unos socios que avanzan a codazos en la tarima como si fueran su presidente Trump en una cumbre?

¿Veni, vidi, vici non? (¿Vine, vi, no vencí?)

¿Por qué si todo se iba consumar el pasado 23 de febrero, desde el desvanecimiento de Maduro y la esfumación del PSUV y de las hordas chavistas, maduristas, socialistas, comunistas, y de la totalidad de los de abajo, los más pobres, y los de afuera, los periféricos y excluidos, hasta la adhesión en masa de doscientos mil militares a Guaidó y el acatamiento sin chistar de las órdenes del comandante Trump, no aconteció ni jota?
¿Por qué luego de que ni siquiera pasara un saco de harinapán por el puente Simón Bolívar las escasas veces que se menciona el asunto se hace sin convicción ni fuerza, como por salir del paso o cumplir con el mandato superior?

¿Qué fue de Richard Branson, el pirata filántropo? ¿Volvió a lo suyo, la conquista espacial, Space is Virgin territory (el espacio es territorio virgen) (Branson, 2018), de la que no debió desviarse para promover la violación de una frontera y por abrirle negocios a la nada virginal empresa de su propiedad?

¿Cómo es que Cúcuta retornó de improviso a la normalidad de la indiferencia nacional hacia las fronteras, cuando hace unas semanas no se adquiría un tiquete aéreo para visitarla y de un día para otro las aerolíneas no consiguen un pasajero hacia su destino?

¿Cuántas moscas entran en la boca abierta?

¿Por qué Iván Duque va lanza en ristre contra el gobierno venezolano desde que fue el hombre que dijo Uribe y sigue igual de montaraz contra los vecinos aun cuando su jefe se hace el que recula? ¿Los incondicionales de Duque lo dejaron solo, otra vez, y se arrastran por el piso buscando réditos caídos para las alcancías electorales de 2020 y 2022?

¿El presidente colombiano se enreda solo, y se deteriora la cabeza en la pasión por el fútbol y la boca en la inexperiencia diplomática? ¿Se empujó sin ayuda de la cómoda butaca del anonimato al ruedo encarnizado del desprestigio, o, inclusive, para ello requirió del empujón de la mano que mece su cuna?

¿Quiénes serán tan hábiles de concretar lo que fueron incapaces de hacer, entre otros, el presidente Duque en Colombia, Moreno en Ecuador, Bolsonaro en Brasil, Macri en Argentina, Trump en Estados Unidos: abrir los sesos y cerrar la boca, para luego poder agradecérselo ellos mismos?

¿Cómo recuperar el petróleo venezolano con los funcionarios de empresas gringas?

¿Para qué nombraría el autonombrado presidente interino Guaidó un Consejo Transitorio de Administración de Petroleos de Venezuela,PDVSA, y de su refinadora Citgo Petroleum Corp.,la octava más grande en Estados Unidos, si carecerá de autoridad y, sobre todo, de acceso a los activos?

¿Será que el anterior analista de posturas desquiciadasde Fox News, John Bolton, está dándole curso a los ilegales anuncios que hizo finalizando enero, a través de Fox Business, cuando en un arrebato de honestidad expresó que la meta de la encerrona contra Venezuela es su petróleo?

¿Cómo es que una Asamblea Nacional en desacato, cuyos actos son jurídicamente nulos, designa una Junta Directiva integrada por figuras vinculadas de forma directa con las petroleras y financieras estadounidenses, que revolotean alrededor como rapaces? (Guaidó, 2019). ¿La filial Citgo se abrió para el efecto de la casa matriz, y se llenó de expertos petroleros, diestros especuladores, pero ignorantes absolutos en los asuntos reales del país? (Reuters, 2019).

¿Para qué utilizará el señor Guaidó tantos empleados nominales si no le sirven para nada y qué pretenderá si no es abultar las faltriqueras de tantos parásitos que llevan dos décadas sin parasitar de Venezuela? ¿En qué nivel es cierto que nombrando burócratas de Harvard Guaidó retribuye simbólicamente a los pudientes que lo financian?
¿Los sueldos que no pague ahora los cancelaría en coimas y con intereses si en alguna época remota tuviera el menor chance de ser presidente y lo fuera? ¿Cuánto tiempo tardaría en hacérseles el loco a los puntales presentes, así como en negar las deudas con Rusia y China, que ahora reconoce de labios para afuera y sin que nadie se lo pregunte? (Forbes México, 2019).

¿Por qué retorna y pareciera que se va?

¿Guaidó dejó de ser el mandatario viral en redes nombrando funcionarios a diestra y siniestra y vuelve a ser el saboteador callejero de toda la vida? ¿Retorna el presidente virtual o el canciller implícito que visitó sus embajadas imposibles y promete asistir a foros figurados?

¿O se dejó de cónsules y procónsules tan sólo porque se le acabó el listado de los países que aceptan obligados que él es parte de gobierno alguno y que de miedo lo reconocen como tal?

¿Regresó Guaidó a Caracas con los bolsillos cargados de piedras y con el designio de descabezar chavistas, o apenas para suicidarse en la fuente de Altamira del mismo modo que lo hizo una vez la señora Woolf en el río Ouse? ¿Alguien exento de los sustos de una represalia estadounidense puede creer que Guaidó ha leído a Virginia Woolf, o que ha ojeado cualquier libro en su vida de extremista?

¿En cuánto tiempo regresará a Washington por la debida reprimenda de su réquiem inconcluso, con el agravante de no ser Mozart ni ser músico? ¿O, finalmente, envejecerá en Bogotá sobre el regazo de Carmona, otro golpista frustrado, a la espera de relevarlo en olvidos?

¿Cómo duplicar un problema que no existía?

¿Al fin a los estadounidenses de la cúpula les quedó claro que luego de bombos y amenazas empotraron a Nicolás Maduro Moros en la presidencia de la República Bolivariana de Venezuela de modo irrestricto, por lo menos hasta la fecha en que culmina su actual período, en 2025, haciéndole la segunda, no a la oposición en el exilio ni a la muy distinguida de Los Palos Grandes, El Rosal, Las Mercedes, El Hatillo o Chacao, como era el propósito, sino al pueblo venezolano puro y raso que votó por él?

¿Entenderían los Estados Unidos que ahora, además de lidiar con un Maduro reforzado, tendrán que ver cómo deslavan los grafitis del Guaidó que pintaron por las paredes del Grupo de Lima? ¿Ya son conscientes de que duplicaron su problema?

¿A eso se debió que el vicepresidente Pence le hiciera reproches en Bogotá al presidente “encargado” con el cual quedaron encartados? ¿En qué fugaz instante pasó el imperio de contar con un señor investido como presidente interino encargado a tener un joven con traje de señor que cansa a todos con el trajín de presidente ímprobo e impostor?

¿Lavarse la cara antes o después del sabotaje?

¿Quién será Trump en el futuro si deja de hacer lo que dice que hace o si sigue haciendo lo que no sabe, y, sobre todo, si no se cansa de las pocas cosas triviales y vanas que de verdad perpetra?

¿Cómo ha conseguido recaudar tanto odio a lo largo del ancho mundo, para su país y para sí mismo, por la manía de mostrarle los dientes a cuanto país no se le arrodilla como empleado de Mar-a-Lago o los casinos?
¿Cómo logra alguien ser lo que no es sin involucrar la más mínima cuestión filosófica? ¿Y qué clase de expresidente será Guaidó cuando deje de ser el presidente que jamás fue?

¿Andarán bien encaminados quienes consideran que esa será una tarea facilísima y que es un asunto del que él solo empezó a encargarse con su correría sin ton ni son por Suramérica, que en los utópicos mundos renacentistas hubiera sido sin su infeliz retorno?

¿Y cómo lavarán la cara los Estados Unidos y la dejarán presentable para otro sabotaje, después de abanderar la charada aspaventosa y golpista que resultó ineficaz para cruzar los escudos de plástico de la Guardia Nacional y del Ejército Bolivariano, pero un certero tiro en el pie al momento de descomponer el discurso mentiroso de lo solidario y lo humanitario empacado en las inseguras bolsas con arroz de la USAID? (RT, 2019). 

¿Guay que sí o guay que no?


¿Guaidó regresa a Venezuela frustrado porque la cosecha del "Venezuela Aid Live” se trilló dañada; por el intento frustrado de la ayuda humanitaria; porque no fue secundado ni por los presidente careadores en la demanda de una cordial intervención militar?

¿O porque en su peregrinaje de menesteroso lo recibieron los mismos países que ya lo habían reconocido con el resumen de lo que ya le habían dicho, o, peor aun, con el borrador sin revisar, como en Paraguay?

¿Y por qué será que Guaidó volvió, antes que a amenazar a los militares que no le paran bolas, a implorar a los suyos que se vuelquen de nuevo hacia las calles para joderse sus propias rutinas de barrios de estratos altos y a suplicarles a las pobres viejecitas del San Ignacio y del Tolón que sacudan con las fuerzas restantes sus alhajas con diamantes?

¿Su regreso es otra moneda lanzada al aire donde apuesta que con cara ganará y con sello o cruz no perderá? ¿Piensa que si la Justicia venezolana osa su captura lo transforma en mártir y si no hace nada él tratará de cobarde al gobierno de Maduro?

¿Qué tal que Guaidó tenga razón y los Estados Unidos, por sus juegos estratégicos de guerras comerciales, geopolíticas y mediáticas, lo asciendan de presidente encargado a caporal de planta? ¿O no la tenga y que, de la misma manera que hace unas semanas nadie sabía de él, en unos meses nadie recuerde quién o qué fue?
¿Y qué triste que muy pronto sus seguidores embaucados tengan que parafrasear la entrada de aquel himno colombiano del Sur, La Guaneña, y que en Caracas o Bogotá tararen: “Guay que sí, guay que no / ¡Guaidónos engañó!”?

Escrito por Juan Alberto Sánchez Marín.
Bibliografía