Por: José Miguel Vázquez.
Nuestra provincia, en estos últimos días del 2008, vive un movimiento constructivo pocas veces visto en los últimos años. La reanimación de poblados y ciudades, que incluyen el arreglo de calles, carreteras y caminos, marcan la diferencia con respecto a épocas anteriores en la que los mantenimientos a viviendas e instituciones estuvieron ausentes.
Entre las obras ejecutadas en estos momentos, destacan la reparación de instalaciones deportivas como el estadio de Béisbol “Victoria de Girón”, la recuperación de centros gastronómicos y de servicios, así como e viviendas en varios municipios y el asfaltado de calles en la ciudad de Matanzas y en otras localidades.
Los propios constructores matanceros reciben también una atención largamente reclamada.
El grupo Empresarial de la Construcción realiza inversiones para mejorar las condiciones de vida y labor en 5 campamentos, en unidades empresariales y centros recreativos. Los trabajos incluyen reparaciones de fachada, pintura y cambio de carpintería.
Algunas direcciones empresariales exhiben una imagen diferente y las personas que allí laboran son expresivas al elogiar las obras acometidas.
Y no se trata solo de lo que aquí en Cuba se conoce como “dar colorete”, o sea mejorar la imágen externa de los inmuebles, pues detrás de la fachada se observa un similar impacto positivo en la calidad de los trabajos.
Entre las obras ejecutadas en estos momentos, destacan la reparación de instalaciones deportivas como el estadio de Béisbol “Victoria de Girón”, la recuperación de centros gastronómicos y de servicios, así como e viviendas en varios municipios y el asfaltado de calles en la ciudad de Matanzas y en otras localidades.
Los propios constructores matanceros reciben también una atención largamente reclamada.
El grupo Empresarial de la Construcción realiza inversiones para mejorar las condiciones de vida y labor en 5 campamentos, en unidades empresariales y centros recreativos. Los trabajos incluyen reparaciones de fachada, pintura y cambio de carpintería.
Algunas direcciones empresariales exhiben una imagen diferente y las personas que allí laboran son expresivas al elogiar las obras acometidas.
Y no se trata solo de lo que aquí en Cuba se conoce como “dar colorete”, o sea mejorar la imágen externa de los inmuebles, pues detrás de la fachada se observa un similar impacto positivo en la calidad de los trabajos.
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