Ninguno de los cubanos de aqui y de allá hubieramos podido siquiera imaginar que las relaciones entre Cuba y Estados Unidos dieran un giro de 360 grados después de 54 años de tensiones una detrás de la otra.
Todo se produjo después del 17 de diciembre pasado, cuando los Presidentes Barak Obama y Raúl Castro dieran a conocer simultáneamente la decisión de ambos gobiernos de restablecer sus relaciones diplomáticas.
Pues llegó el día, justo hoy 20 de julio las antiguas oficinas de intereses de ambos países se han convertido en embajadas, dando inicio a un nuevo proceso en el difícil y escabroso camino de ir a la normalización total de las relaciones.
Sí porque como ya se ha dicho, relaciones diplomáticas no son sinónimo de normalización, aunque eso sí al menos es una puerta abierta que permita que entren por la misma todas las posibles soluciones que ambas partes deseen materializar.
A la parte norteamericana yo diría que le queda aportar la mayor cuota de los problemas a resolver, en primer lugar poner fin a un criminal bloqueo que ha estado lacerando la vida del pueblo cubano durante más de 50 años y que no le permite desarrollar su deteriorada economía producto del ahogamiento sistemático al que ha sido sometido.
Sin embargo paralelo a ello, el pueblo cubano ha dado una muestra ante el mundo de entereza, dignidad y resistencia a tal política genocida, hasta el punto que ha sido el propio actual presidente Obama quien lo ha reconocido públicamente.
No son pocos los que dicen y sostienen que se trata ahora de por otros caminos cambiar el régimen de gobierno en Cuba, quizá, y esa parte no esta descartada, pero habría que ver si pudieran hacerlo a partir de un pueblo altamente conciente que sabe a donde va y cual es el camino que debe seguir.
En un riesgo que vamos a correr, y seguramente la ingenuidad no estará nunca en las mentes de los que actualmente dirigen nuestro país, dicho en otras palabras estaremos vigilantes para salirle al paso a cualquier intento solapado de cambiar nuestra estructura socialista.
Esta mañana tendrán lugar en Washington las ceremonias oficiales de apertura de la que será otra vez embajada cubana, con la presencia de una representación de la sociedad cubana encabezada por el canciller Bruno Rodríguez Parrilla, y en dias posteriores tandrá lugar en la Habana la ceremonia oficial de la nueva embaja de los Estados Unidos de América donde se espera la asistencia del Secretario de Estado John Kerry.
Asi las cosas hoy se abre una etapa en las relaciones Cuba Estados Unidos, que no serán nada fáciles y en la que se requerirá de una buena carga de voluntad para resolver los problemas pendientes.
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