Por: José Miguel Vázquez.
Este 10 de octubre es la fecha que en que un grupo de cubanos en 1868 comandados por Carlos Manuel de Céspedes, el Padre de la de la Patria, decidió alzarse en armas e iniciar un proceso de lucha armada contra España para obtener la independencia.
Aquélla lucha duró diez años, en la que se puso de manifiesto el deseo colectivo de obtener la libertad y convertirnos en dueños de nuestros destinos.
Pero el enemigo era muy fuerte, y ni objetiva ni subjetivamente estábamos preparados para alcanzar ese propósito, si bien quedó sembrada la raíz de la independencia total del yugo español.
El 10 de octubre ha pasado a la posteridad como el primer acto de sublevación y rebeldía, Céspedes al, concederles la libertad a los esclavos, así lo hizo patente y acto seguido les dijo, la otra libertad la de la nación, hay que alcanzarla combatiendo en la manigua.
Pero aquél glorioso ejemplo dado por Céspedes y el grupo que lo acompañaba nos sirve de ejemplo y nos impulsa a seguir en la lucha por tener un país mejor, y una sociedad mejor.
Frente al bloqueo y a cuantas amenazas puedan venir, el 10 de octubre de l868 nos enseña que somos capaces de erguirnos y seguir adelante, no importa las dificultades.
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