Los campesinos cubanos hacia superiores objetivos.

Por: José Miguel Vázquez.

Después de haber transitado por un amplio proceso iniciado hace algún tiempo en la propia base, entiéndase en los propios lugares donde laboran la tierra, comenzará en las próximas horas el Décimo Congreso de la Asociación Nacional de Agricultores Pequeños, ANAP. En estos últimos días los campesinos cubanos han sido protagonistas de ricos debates, que los han conducido a identificar los más acuciantes problemas que los limitan en su diario quehacer desde el punto de vista objetivo y subjetivo. Los más de mil delegados que asistirán al Congreso, irán decididos a buscar soluciones que les permitan ser más productivos y eficientes con el objetivo de haya más alimentos para la población. Si partimos del principio que más del 70 % de la producción agropecuaria del país, proviene de este sector, entonces nos daremos cuenta del tremendo peso que tienen en la vida económica del país. Problemas hay muchos, comenzando por los que se aprecian a simple vista, falta de recursos básicos como fertilizantes, plaguicidas y pesticidas, combustibles, equipos y otros elementos que solo se adquieren en el mercado internacional, y que ante las actuales dificultades financieras, hacen más difícil su adquisición, por lo que se impone buscar soluciones alternativas y que al mismo tiempo preserven nuestro medio ambiente. Resulta necesario que el engranaje producción-comercialización vayan de la mano, y que los cooperativistas se sientan estimulados por los precios de sus productos de manera que el destino final sean los mercados de venta a la población. Pero además de los problemas materiales, y organizativos están los que dependen del hombre y que también constituyen un freno para obtener mejores resultados. Hay una dura realidad, muchos de los alimentos que de forma repetida importamos, se pueden producir en nuestros propios campos, y esa es la razón que debe mover sus acciones para revertir esta situación. Otro elemento a tener en cuenta es que nuestras cooperativas se nutran de sangre joven, y eleve sus potencialidades productivas, es decir, que los miles de jóvenes que actualmente se preparan como agrónomos, técnicos en veterinaria y otras especialidades, una vez vencidos sus estudios se vuelquen en el trabajo de la agricultura. Sin lugar a dudas los resultados de este X Congreso Campesino, tendrán un impacto decisivo en el tan ansiado autoabastecimiento de alimentos, uno de los principales objetivos estratégicos que persigue el país. En nuestros campesinos sobra la voluntad y la decisión para lograrlo.