Campeón sigue su camino
Por: Sigfredo Barros
Por: Sigfredo Barros
Tomado de Granma.
Santiago de Cuba dio un paso de avance en su camino hacia la retención de su corona al disponer de los Leñadores tuneros por cuatro carreras de diferencia y convertirse en el segundo semifinalista de los play off de la XLVII Serie Nacional, mientras los Gallos espirituanos le dieron un segundo picotazo a los Vaqueros habanistas y hoy saldrán a tratar de dejarlos en el camino.
Ronnier Mustelier clavó el puntillazo.
Las Avispas de Antonio Pacheco aprovecharon todo lo que les regaló el pitcheo de los discípulos de Ermidelio Urrutia, incierto como ha sido la tónica en este disputa de cuartos de finales. Es imposible aspirar a la victoria cuando se regalan dos boletos y se tiran tres pelotazos ante una selección de tamaña ofensiva y, por si fuera poco, se cometen tres pifias por salida.
El resultado fueron tres anotaciones que constituyeron todo un lastre a lo largo del choque. Los dueños de casa –alentados por su gran afición en el Mella -, desperdiciaron oportunidades, como el roletazo de Osmani Urrutia al box con las bases llenas, que sirvió para fabricar un protestado doble play cuando Urrutia corrió por dentro e interfirió el tiro de Meriño a la inicial, lance bien apreciado por el árbitro de home, Reynol Alfonso.
El puntillazo lo clavó un hombre que no inició bien esta primera etapa de post temporada, Ronnier Mustelier, con largo cuadrangular por el bosque izquierdo, con un compañero en circulación. Bicet, a pesar de no ser el mismo de inicios de la clasificatoria, aguantó 3 y 2 tercios antes de la llegada de Félix Rivera.
En el turno vespertino, los Gallos de Juan Castro esperaron pacientemente su oportunidad. Y esta llegó de improviso, en el bien llamado inning de la suerte, cuando le abrieron con dos sencillos a Yadiel Pedroso y el emergente José Luis Sáez empató el choque con un largo doblete entre el derecho y el central, ante las ofertas de un descontrolado José Ángel García, y luego ni el zurdo Noel Argüelles ni el diestro Miguel Lahera pudieron mantener la pelota en la zona de strike.
El batazo que sacó de juego a los habanistas fue el cuarto sencillo de Yunieski Gourriel en la tarde, acompañado por el primer error que comete el jardinero central Juan Carlos Linares en la presente temporada. De lo demás se encargó un relevista poco conocido, Yasnier Sosa, que dejó a sus adversarios sin jits ni carreras en el último tercio.
Santiago de Cuba dio un paso de avance en su camino hacia la retención de su corona al disponer de los Leñadores tuneros por cuatro carreras de diferencia y convertirse en el segundo semifinalista de los play off de la XLVII Serie Nacional, mientras los Gallos espirituanos le dieron un segundo picotazo a los Vaqueros habanistas y hoy saldrán a tratar de dejarlos en el camino.
Ronnier Mustelier clavó el puntillazo.
Las Avispas de Antonio Pacheco aprovecharon todo lo que les regaló el pitcheo de los discípulos de Ermidelio Urrutia, incierto como ha sido la tónica en este disputa de cuartos de finales. Es imposible aspirar a la victoria cuando se regalan dos boletos y se tiran tres pelotazos ante una selección de tamaña ofensiva y, por si fuera poco, se cometen tres pifias por salida.
El resultado fueron tres anotaciones que constituyeron todo un lastre a lo largo del choque. Los dueños de casa –alentados por su gran afición en el Mella -, desperdiciaron oportunidades, como el roletazo de Osmani Urrutia al box con las bases llenas, que sirvió para fabricar un protestado doble play cuando Urrutia corrió por dentro e interfirió el tiro de Meriño a la inicial, lance bien apreciado por el árbitro de home, Reynol Alfonso.
El puntillazo lo clavó un hombre que no inició bien esta primera etapa de post temporada, Ronnier Mustelier, con largo cuadrangular por el bosque izquierdo, con un compañero en circulación. Bicet, a pesar de no ser el mismo de inicios de la clasificatoria, aguantó 3 y 2 tercios antes de la llegada de Félix Rivera.
En el turno vespertino, los Gallos de Juan Castro esperaron pacientemente su oportunidad. Y esta llegó de improviso, en el bien llamado inning de la suerte, cuando le abrieron con dos sencillos a Yadiel Pedroso y el emergente José Luis Sáez empató el choque con un largo doblete entre el derecho y el central, ante las ofertas de un descontrolado José Ángel García, y luego ni el zurdo Noel Argüelles ni el diestro Miguel Lahera pudieron mantener la pelota en la zona de strike.
El batazo que sacó de juego a los habanistas fue el cuarto sencillo de Yunieski Gourriel en la tarde, acompañado por el primer error que comete el jardinero central Juan Carlos Linares en la presente temporada. De lo demás se encargó un relevista poco conocido, Yasnier Sosa, que dejó a sus adversarios sin jits ni carreras en el último tercio.
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