Reflexiones del domingo.

 Por: José Miguel Vázquez.

No me cabe la menor duda de que vivimos tiempos difíciles desde el punto de vista internacional, quien crea que no existe la llamada "guerra fría" entre algunas naciones están equivocados. Para mi, estamos ante la presencia del triángulo de la guerra compuesto por Estados Unidos, Rusia y China.

Basta observar los actuales acontecimientos a escala mundial para darnos cuenta que práctixcamente estamos ante la antesala de la tercera Guerra Mundial. Parecería que con la desaparición del campo socialista encabezado por la extinta Unión Soviética, el mundo viviría mejores tiempos, pero la realidad dice lo contrario.

Estamos ante la presencia de una aguda carrera armamentista entre las potencias anteriormente citadas, solamente hay que echarle una ojeada a sitios como Hispan TV, Sputnik, o RT entre otros para contemplar las más sofisticadas armas de guerra existentes en la actualidad listas para ser utilizadas en una guerra en la que de seguro no habría ni vencedores ni vencidos.

No tardó mucho tiempo después de desaparecida la Unión Soviética, para que afloraran serias contradicciones entre Estados Unidos y Rusia por un lado y China por el otro, por razones de mercado, petróleo,geoestrategia, finanzas y otros elementos.

Estas contradicciones, particularmente entre EEUU y Rusia ya no son entre potencias de distintos regimenes sociales, ambas hoy por hoy son economías de mercado, Rusia ya no sigue la doctrina socialista, pero si una política que contradice los planes hegemónicos norteamericanos y se establecen manifiestas contradicciones entre las dos potencias nucleares.

Situaciones muy específicas como Ucrania y sus conflictos internos, la guerraen  Siria y el apoyo de occidente a terroristas en ese territorio, la agresión de Israel a Palestina,y el nuevo conflicto en el mar de la china, son a mi modo de ver la polvora lista para estallar, sino se ataja a tiempo.

Creo que se impone que estas tres naciones sopesen las catastróficas consecuencias que tendría una guerra entre ellas, en las que otras naciones se verían también involucradas y expuestas a la destrucción atómica. la pérdida de millones de vida humanas y el inevitable descalabro climático que esto tendría para todo el planeta.

Por todo lo anteriormente expuesto, solo nos cabe seguir observando los acontecimientos de por sí bastante preocupantesy alzar nuestras oraciones para que la tan destructiva tercera Guerra Mundial no estalle en bien de la humanidad toda.