Por: José Miguel.
Desde horas las primeras horas de la mañana de este sábado la provincia de Matanzas pasó a la etapa de Alarma Ciclónica, decretada por el Estado Mayor Nacional de la Defensa Civil.
El tiempo en la provincia se ha venido deteriorando en las últimas horas, con lluvias que si no son fuertes hasta el momento son bastante continuas y con vientos de hasta 90 kilómetros por hora.
Todas las medidas de precaución han sido tomadas en el territorio provincial, y se espera que tanto por la acción de las lluvias y el viento los daños no sean de gran consideración-
Todos los objetivos económicos han sido resguardados, y el inicio del curso escolar ha sido pospuesto debido a esta situación.
La población se mantiene al tanto de los partes meteorológicos por la radio provincial y la propia televisión.
La población cubana y matancera en sentido particular ya tiene experiencia de estos fenómenos y sabe que hacer en un momento determinado.
Por lo pronto hay calma entre los residentes, la mayoría se encuentran resguardados en sus residencias e incluso en no pocos casos ha brindado su vivienda para albergar a alguna persona evacuada de zonas de peligro.
Desde horas las primeras horas de la mañana de este sábado la provincia de Matanzas pasó a la etapa de Alarma Ciclónica, decretada por el Estado Mayor Nacional de la Defensa Civil.
El tiempo en la provincia se ha venido deteriorando en las últimas horas, con lluvias que si no son fuertes hasta el momento son bastante continuas y con vientos de hasta 90 kilómetros por hora.
Todas las medidas de precaución han sido tomadas en el territorio provincial, y se espera que tanto por la acción de las lluvias y el viento los daños no sean de gran consideración-
Todos los objetivos económicos han sido resguardados, y el inicio del curso escolar ha sido pospuesto debido a esta situación.
La población se mantiene al tanto de los partes meteorológicos por la radio provincial y la propia televisión.
La población cubana y matancera en sentido particular ya tiene experiencia de estos fenómenos y sabe que hacer en un momento determinado.
Por lo pronto hay calma entre los residentes, la mayoría se encuentran resguardados en sus residencias e incluso en no pocos casos ha brindado su vivienda para albergar a alguna persona evacuada de zonas de peligro.
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